Ubicada en la base de la Sierra de Parapanda y a unos 12 Kms. de Íllora, esta población -de unos 500 habitantes-, posee el atractivo natural de su paisaje y de sus bellas y cuidadas casas campesinas.
Su centro urbano está bellamente trazado con una placita, cuyos monumentos mas destacables son los edificios religiosos: la Iglesia Parroquial y la Capilla de los Dávila.
La población se encuentra principalmente dedicada a la agricultura.
Celebra sus fiestas patronales en honor a la Virgen de las Mercedes a mediados de agosto.
Cabe destacar la tradición de “Atar al diablo” que se celebra en el Puente Castilla, junto al río Genil.